sábado, 15 de septiembre de 2012


Es pacio

VOY CAMINANDO POR LA CALLE, RESPONDEN LO SUFICIENTE MIS PIERNAS PARA DEJARME ANDAR.
POR MOMENTOS ME INVADEN IMÁGENES QUE DESEARÍA SE QUEDARAN PARA SIEMPRE CONMIGO.
POR MOMENTOS, NO ES ÉL. TAMPOCO MIRA EL ÁRBOL.
AHORA SÓLO ME CONCENTRO EN LA LUZ DE COLOR ROJO QUE INDICA QUE PUEDO PASAR, QUE ESE PEDACITO DE PAVIMENTO SE ABRE PARA MÍ, SÓLO PARA QUE YO SIGA CAMINANDO. ALGUNA VEZ HE ESTADO POR AQUÍ.  ESAS IMÁGENES QUE IRRUMPEN EN MI MENTE, ME DEJAN MÁS CONCIENTE AÚN DE LA REALIDAD. ME SIENTO VULNERABLE. ZUMBIDOS, GRITOS, BOCINAS. DE REPENTE VEO ESOS OJOS, TAN CRITALINOS COMO EL AGUA CLARA QUE CORRE SIN REMORDIMIENTO. ¡AH QUÉ LIBRE SE SIENTE SER DE AGUA! VOY A EXTENDER EL SUEÑO UN POCO MÁS. HASTA QUE MÁS NO PUEDA DURAR, HASTA QUE SEA VERDADERO. HASTA QUE LA LUNA HABLE O LA MONTAÑA GRITE. CON CUALQUIERA DE ESAS OPCIONES PODRÍA YO CONFORMARME. POR NO QUERER ABUSAR, POR NO QUERER ESTAR, ESTOY. ANTES PENSABA QUE SÓLO EL INVIERNO ERA DE VACÍO, AHORA VEO NUEVAMENTE QUE ESTA ESTACIÓN NO ME REGALA NINGÚN OTRO COLOR, COMO YA EXPRESÉ EN  ESCRITOS ANTERIORES. A veces, el cristalino, azul son colores que me invitan a pasear. Entonces deseo: Paseo por el mar. Paseo por el mar. Ahora todo gira paralelamente. Todo. Y no existe el equilibrio. Ahora me asfixia el cielo, y también quizás aquella melodía ya no existe. Salgo afuera. Adentro es afuera también. Encuentro seres con los que deseo compartir este viaje y hacerlos parte de mi aventura. Fusionar mi alma con el viento, ya no existe tampoco el miedo de abandonar este cuerpo.

sábado, 18 de febrero de 2012

lunes, 7 de noviembre de 2011

Superfluo mundo



Nunca pensé pero ahora soy de agua; soy de aire.
El espacio que rodea mi cuerpo es infinito.
No entiendo el cielo; acá todo es de fantasía.
Vos que te preguntabas si las nubes eran de colores, bueno sí claro que lo son, aunque yo así no las esperaba.
Nubes de algodón también colisionan con mi alma.
En fin ya estoy aquí, en mi nuevo lugar.
El viento nunca retrocedió.
Ya está en vos y en mí.
Una vez más dejo que esta impresión afecte los sentidos, fluya por mis arterias y me deje en libertad.
El momento es impredecible, como lo es ahora tu mirada que por momentos se articula con la mía.
Ya no hay nada que extrañar, todo lo que necesito se encuentra en un tiempo preciso y en un correcto lugar.
El amanecer es simple y no dejará de serlo aunque el atardecer parezca lejano y en ocasiones lo interrumpa.
El destino no está en mis manos, ni en las manos de otras criaturas cuyo tiempo no pueden comprar.
No soy dueño de mi vida, pero tampoco alquilo mi alma.
Habito un cuerpo que me pertenece aunque desconozco hasta cuando.
Nada es tan claro hoy como la mezcla de fosforescencias.
Deseo evadir espacios, lecturas, y personas.
No quiero ser  como ellos.
Prefiero perderme en el espacio sideral.
Como si caminara envuelto en papel sin dejar que este viento me arrastre  para no morirme en cada instante.
Tu mirada es vacía ahora.
Ya no voy a disimular ni disfrazar mis sentimientos.
Ya no quiero ser parte de esto.
Quizás la vida sólo se trate de experimentar con otros vientos.
Mucho es el tiempo que gasté en circular, mucho es el tiempo que gasté en recordar.
Ahora deseo llevar mis sueños a otro lugar.
Y ahora veo las mariposas que vuelan y me señalan un lugar.
Sueños que han viajado lejos y han vuelto a mi encuentro, montañas perdidas en azules días, encuentros poco concretos.
La tierra y las flores. Tus lágrimas, saladas, como agua de mar.
¡Qué superfluo es tu mundo! Y que superfluo era entonces el mío.
Ya nada podemos compartir.
Yo ya estoy acá, y vos …
Vos, allá.






jueves, 15 de septiembre de 2011

Un gusano en las estrellas


El pintor dijo haber escrito  este relato en su niñez:
" Una noche a finales de junio, un niño se pasea con su madre. Llueven estrellas fugaces. El niño recoge una y la lleva en las palmas de la mano. Llega a su casa, la deposita sobre la mesa y la aprisiona dentro de un vaso puesto al revés. Por la mañana al levantarse, deja escapar un grito de horror: un gusano durante la noche, ha roído su estrella."     

Salvador Felipe Jacinto Dalí.

lunes, 20 de junio de 2011

Transición de pensamientos.

Debo haber estado soñando.
Pero fue tan real.
Cada vez que me aferré al mundo,
no dudó en darme la espalda.
Mi vida se inundaba con segundos de vacío.

Pensé:
Mejor dejarlo ir.
Mejor ser libre. 
no soñar, no pedir, ya no amar.

Significa más de lo que sé.

Crecí para sentirme vacía.
Crecí para abrazar y aprender pronto a dejar ir.
Crecí lo suficiente como para haberme olvidado de quién soy ahora
y cual es mi papel en la biblioteca viviente.
Crecí para no entender a las personas,
y para que ellas tampoco me entendieran a mí.
Crecí para arrepentirme de cosas que hice,
y lamentar las que dejé por hacer.
Crecí para perder mi inocencia mas no la perdí.


¿ Es que de eso se trata ?
¿ Crecer para dejar de ser ?
¿ Pór que entonces de niña deseaba crecer?
¿ Qué era lo excitante de sumar años a este cuerpo?




Hoy ya no es tiempo de crecer,
No al menos para mí.
Entonces deseo que las horas no pasen.
Deseo quedarme en este tiempo, el tiempo que yo llamo
“Tiempo de la transición de pensamientos.”
  

lunes, 11 de abril de 2011

Blue Coat



In the realm of my dreams,
I  found you.
You took me by the arm, and
in the middle of a shallow lake I was drowned
I gasped for breath once more.





Blue coat, endowed with beauty,
I saw you right there.



Fair haired creature,
in your soul I used to find peace and love.
Now I long to see you again wearing your blue coat.


Life had worn me out,
my bones needed a rest, thus
I went to your grave, left some flowers,
flowers for which in spring I had begged.


When the winter had set in, it seemed to last longer
than summer did.
Nonetheless, I was not afraid,
for I had seen your green eyes again.


My thoughts in turmoil,
I wish I was ready to watch the twightlight,
to embrace the sun and
to see your pale face once more.

lunes, 4 de abril de 2011

Día uno, día siete.


Domingo de granizo,
deseo enterrar las nostalgias de mi corazón
en algún lugar perdido de este ameno paraíso

Domingo de lluvia,
regalo mis huellas a este día
simplemente  porque en él  tu sonrisa está perdida

Domingo de estrellas,
estertor que nace de ellas.
te extraño de noche, de día
y cuando su brillo es más intenso, siento oscuridad
oscuridad que en sus cuerpos palpita.

Domingo viajero,
oh cuántos domingos por mi vida han pasado!
esa que he perdido y que he encontrado,
esa que he añorado y olvidado
y que por momentos como
un pétalo en el viento se ha desflorado.